En agosto, estando en mi cama, al lado de mi esposo y sin que él se despertara, experimenté cosas maravillosas, ya sé que no necesito un lugar especial para conectarme, basta que me relaje y me entregue a la paz. Comencé a sentir el calor y que mi cuerpo se alivianaba y acumulaba calor y me enseñaron que la energía es un instrumento, que es flexible, que si yo quiero proteger a alguien, por ejemplo, puedo estirar mi brazo energético y abrazarlo… o puedo visualizar que mi energía se alarga y rodea a quien quiero amar.
Aparte de mi energía puedo pedir que descienda energía protectora hacia otros, pero cuando quise pedir que descendiera luz transmutadora sobre otro me hicieron comprender que el único modo que funcione la transmutación, base de la evolución, es que sea invocada desde el interesado… por lo que concluyo que se debe hacer pasar buenos momentos, de amor y alegría a la gente que sufre para que en estados de ánimo más lúcidos desee quemar sus aspectos negativos y transmutar hacia el amor…
No hay comentarios:
Publicar un comentario